Hola papá. Hoy es tu cumpleaños. Hablo en presente porque siempre estás conmigo. El 29 de diciembre es un día triste, pero normal. Las cosas se van pasando. La tristeza no es por tu muerte en si misma, sino por no tenerte cerca, poder hablarte, contarte las cosas que te contaba, contar contigo para todo, como antes. Ahora soy más fuerte y no puedo recurrir a nadie como cuando vivías. Tu siempre estabas, eras mi padre, pero también mi alma gemela. Cuanto te quería, papá, cuanto te quiero aún, cuanto te querré siempre. De vez en cuando aún te lloro, como ahora, porque las cosas no han vuelto a ser iguales. La vida te va quitando lo que más quieres y tienes que seguir viviendo, seguir riendo, seguir luchando. Y además con el tiempo olvidas. Aunque yo recuerdo perfectamente tu cara, tu sonrisa y tu cariño. Me siento cerca de ti, papá, te quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario