martes, 8 de abril de 2008

La decisión 2

Jo Ana. Ha pasado casi un mes y todavía nada. Así no llegas a ninguna parte, que tu admirador necesita correr, al menos en estas primeras fases. He dicho correr, no te confundas. Porque ya sabemos que su punto débil son los años. Pero ya me has dicho que tiene unos cuantos puntos fuertes que lo contrarrestan: es fiable, responsable, te quiere y lo mejor que me has dicho de él hasta ahora: !Es que es un cielo¡.
Bueno, pues hasta a los ángeles hay que verles el plumero. De modo que ponte a ello. Si el sábado tiene algún problemilla de cualquier tipo, no te dejes vencer, que te conozco. Dale tiempo. Y hablo solo del plan social, no del íntimo.
Ay Ana, me preocupa que no tengáis un nido de amor, y que el no conduzca. ¿No será de esos hombres blanditos que te hará tomar todas las decisiones?
Supongo que habrás sopesado los pros y los contras concienzudamente. Y ha ganado él, por lo que veo. Me alegro por ti, por lo que tu quieres, por lo que deseas.
No dejes que nadie se mezcle en tu vida, ni dejes que le hagamos huir. Porque ya sabes que los Ballesteros son temibles.
Y cuando le hagas la prueba del algodón -por cierto ¿tomará viagra?- ten también paciencia y no compares ni recuerdes. Concéntrate. Y si las cosas no salen bien, paciencia, que el hombre lleva 8 años esperándote. Y si sale todo bien, enhorabuena, un problema resuelto y un punto más a su favor.
Bueno prima, que tu verás, que me mandes una foto y me tengas informada. No les cuentes a tus amigos las cosas con pelos y señales, porque el podría resentirse. Guardar vuestro mundo para vosotros, y en todo caso, me lo cuentas a mi.
Y tu madre y tu padre, que esperen, que sé hasta lo que te dirán.
Tu padre te dirá que te vas a quedar viuda rápido si te casas con el. Que está en la peor edad, la de los infartos.
Tu madre te dirá -además de que podría ser tu padre- que dentro de nada le tienes con los viejos, jugando la partida.